¡Que cante, que cante!

Gritaba un parlante muy vociferante en la calle Hernández, vamo pá delante repetía un rumiante ¡que Messi es brillante bastante rampante y muy importante, algo inconstante,que mande punzante un centro rasante bien sobre el pescante decía dominante, haceme el aguante que tomé un purgante y quiero alejarme con papel secante y sin descuidarme volver al instante, soy un laburante, que cante, que cante pá los militante, que nadie se levante, después del partido canta L-Gante para el Comandante.

 

humor y memoria