El recuerdo que vamos a compartir ahora puede considerarse extraño, ya que la nota publicada en la revista deportiva El Grafico 2247 de 31 de octubre de 1962.
El entrevistado no es un deportista o relacionado con el deporte, se trata de un sacerdote, el Padre Alejandro Mayol presentado como sacerdote, instrumentista, cantor, suceso, futbolista hincha y porteño.
En la entrevista el Padre Mayol se confiesa futbolero, hincha de River y admirador de Pedernera, integrante del llamado Movimiento de Curas termundista, amigo de el Padre Mujica, apasionado por la música, colaboro junto al Padre Catena en los textos litúrgicos de la Misa Criolla.
En la nota se ofrecen las letras de dos tangos compuestos por el Padre Mayol, Mirón y El Alumni y la clave, con fuerte contenido social, por ejemplo una estrofa de El Miron dice:
Miron, hay que ensuciarse las manos, hay que meterse en el barro, hay que cinchar de este carro, hay que arreglar la ciudad.
En este mundo que nace, mirar solo, es traicionar.
En el tango El Alumni y la clave, comienza así:
Estantería que se ha venido al suelo, así es el mundo, vivimos al revés y uno no sabe donde queda Vieytes si de este lado o del otro de la pared.
Porque el que vende barquillas a los niños, trafica en drogas por plaza San Martin.
Porque unos corren la liebre el santo día, y otros no piensa mas que en karting y en Grand Prix
Botes muy largos van por la costanera y hay suelas rotas de tanto caminar, fichas de mil siembran el verde en la ruleta y muchas sopas son agua y nada mas.
Hasta aquí la nota, debemos agregar que Alejandro Mayo dejo el sacerdocio en 1969, contrajo matrimonio y tuvo 4 hijos.
Compuso el Vía Crucis La Pasión Según San Juan, y el pesebre Cantata al Emanuel.
Falleció el 3 de febrero de 2011.
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